"Así se aniquila la democracia
alemana* en el preciso momento en el que el pueblo alemán estaba a
punto de organizarla después de una dura lucha, y es aniquilada por
aquellos mismos que durante la guerra no se cansaron de proclamar que
aspiraban a darnos la democracia... Alemania ya no será más un
pueblo ni un Estado, sino que se convertirá en una empresa comercial
puesta por sus acreedores en manos de un recaudador, sin concedérsele
siquiera la ocasión de mostrar su voluntad de cumplir sus
obligaciones espontáneamente. Esa Comisión*, que va a tener su cuartel permanente fuera de Alemania, va a tener sobre Alemania derechos incomparablemente mayores que jamás el Emperador;
el pueblo alemán, bajo este régimen quedará, durante décadas,
privado de todo derecho, y en una extensión mucho mayor que ningún
pueblo en los días del absolutismo, de toda independencia de acción,
de toda aspiración individual de progreso económico,e incluso de
progreso moral."
Comentarios acerca de la Comisión de reparaciones hechos por la Comisión financiera alemana en Versalles en 1919. Citado por J. M. Keynes en Las consecuencias económicas de la Paz.
* Cada vez que aparezca la palabra Alemania, alemán o alemana sustituir por Grecia, griego o griega...
* Sustituye la palabra Comisión por Troika...
La
política de reducir a Alemania a la servidumbre durante una
generación, de envilecer la vida de millones de seres humanos y de
privar a toda una nación de felicidad, sería odiosa y detestable,
aunque fuera posible, aunque nos enriqueciera a nosotros, aunque no
sembrara la decadencia de toda la vida civilizada de Europa. Algunos
la predican en nombre de la justicia. En los grandes acontecimientos
de la historia del hombre, en el desarrollo del destino complejo de
las naciones, la justicia no es tan elemental. Y si lo fuera, las
naciones no están autorizadas por la religión, ni por la moral
natural a castigar en los hijos de sus enemigos los crímenes de sus
padres o jefes.
J. M. Keynes en Las consecuencias económicas de la Paz.